Kusuriya no Hitorigoto 21.

Buenas a todos.

He estado a puntísimo de NO sacar este capítulo, debido a que es muy posible que me cierren la página de Facebook. Pero entonces recordé que, cuando empecé esta página, hice una promesa: 1 capítulo a la semana. Y por mis c****es que lo voy a cumplir. Disfruten del capítulo de hoy. Y recen para que la semana que viene haya otro y no se me crucen los cables del enfado.

21.- Fiesta en el Jardín, 3ª parte

Cuando llegó el mediodía, Maomao alternó con Honnyan para esperar detrás del consorte Gyokuyou.

Al escuchar el consejo de Infa, los tres kanzashi que ella recibió se deslizaron por su cinturón por el momento. Dado que la cosa que la Consorte Gyokuyou le dio era el accesorio para el cuello, usar un kanzashi habría estado bien. Pero eso haría una diferencia en el mérito de los kanzashi que ella no usó.

Fue todo un espectáculo ver el banquete una vez más desde los asientos de honor.

Los oficiales militares se alinearon en el lado oeste, y los funcionarios civiles se alinearon en el este. Sentado aproximadamente a un veinte por ciento de la mitad de la larga mesa, estaba Gaoshun en un asiento del lado del oficial militar. Aunque se dio cuenta de que él era más un pez gordo que ella pensó, se sorprendió de que el eunuco fuera capaz de alinearse allí sin sentirse fuera de lugar.

El hombre grande de antes también estaba sentado allí. Estaba más cerca de los asientos inferiores que Gaoshun, pero podría ser más exitoso teniendo en cuenta su edad.

Por el contrario, Jishin no se veía por ningún lado. Al ver que resultaba tan llamativo, sin embargo, debería ser alguien que encontrarías fácilmente.

Como no había necesidad de encontrarlo, decidió dedicarse a su trabajo principal.

El alcohol vino antes que la comida. Se vierten poco a poco de recipientes de vidrio en copas de plata.

Sería negro si hay veneno de tipo arsénico.

Olfateó la taza mientras la giraba lentamente, y sostuvo el contenido en su boca. Aunque sabía que no había veneno, si un catador de veneno no se tragaba el alimento, la cata de veneno no sería reconocida. Se humedeció la garganta de un trago, luego se enjuagó la boca con agua fresca.

(Oh.)

Resulta que la gente la estaba observando.

Los otros catadores de veneno aún tenían que beber de sus copas.

Después de confirmar que nada le sucedió a Maomao, tímidamente se llevaron las copas a los labios.

(Bueno, eso es normal)

Todos temen a la muerte.

Si hubo alguien que lo intentó primero, era más seguro mirar para asegurarse de que ellos mismos no lo hicieran.

(Si tiene que usar veneno en el banquete, debería ser de acción rápida).

Entre esas personas, el que deliberadamente ingiera veneno sería solo Maomao. En este mundo, no hay un tipo tan raro de persona.

(Si es necesario, fugu sería bueno. Las tripas se disolverían muy bien en la sopa). (Para los que no lo sepan, fugu también es conocido como Pez Globo, y es una de las criaturas vivas con el veneno más letal que existe. También se dice que su carne, la que no está envenenada, es un manjar).

Esa sensación de entumecimiento en la punta de la lengua era irresistible. Para tener esa sensación, no sabía cuántas veces bombeaba repetidamente en su estómago y vomitaba. Mientras pensaba en eso, se encontró con la mirada de la doncella que traía los alimentos. La esquina de sus labios estaba alzada. Ella sonreía desagradablemente. Estaba completamente encantada con eso.(para que quede claro, la que sonreía de forma desagradable era Maomao)

Ella regresó a su habitual rostro inexpresivo.

El aperitivo que recibió fue un plato que ocasionalmente era servido en la cena, siendo la comida favorita del emperador.

Parece que la comida fue cocinada del lado del Palacio Interior. Lo de siempre

Mientras los otros catadores de veneno miraban a Maomao, ella rápidamente lo recogió con sus palillos.

Era un namasu de pescado y vegetales. [N / T: un plato ligeramente encurtido en vinagre de arroz durante un par de horas] Aunque era un viejo lujurioso, la catadora de veneno tenía que decir que sus hábitos alimenticios estaban dirigidos de forma inesperada hacia la salud.

(La configuración es incorrecta)

No eran los ingredientes habituales.

No podría ser que hayan cometido un error con la receta de la comida favorita del emperador.

Si ese fuera el caso, esto tenía que ser algo hecho para una consorte diferente.

Cuando la Consorte Gyokuyou estaba amamantando, prepararon un menú para la producción continua de leche.

La cata de veneno terminó. Al ver a todos mientras cada uno comía de su plato, ella decidió que realmente era solo un error de configuración.

La Consorte Riishu, la que no podía leer la atmósfera, estaba pálida.

(¿Es algo que ella odia?)

Con la comida favorita del emperador ante ella, no había forma de que la consorte pudiera dejarla.

Entonces ella aguantó y lo estaba comiendo.

Cuando la consorte miró hacia atrás, la doncella catadora de veneno cerró los ojos, sus labios temblaban. Ella vio y descubrió el débil arco que dibujaron esos labios.

(Ella vio algo desagradable.)

Al volver la mirada, Maomao recibió el siguiente plato.

Sería bueno si este fuera un banquete normal.

***

Rihaku sentía que no podía encajar con los nobles de clase alta que miran hacia abajo desde los círculos del palacio.

¿Cómo es esto divertido, pensó, tener un banquete afuera en el frío y el viento?

No, estaría bien si fuera solo un banquete. Al igual que en los viejos tiempos, disfrutar el alcohol y la carne con compañeros mutuos en un jardín de duraznos sería ciertamente divertido.

Sin embargo, cuando había nobles juntos, siempre hay veneno en la mano.

Las cocinas, sin importar los ingredientes de alta calidad, las técnicas secretas empleadas, su exquisitez se reducirían a la mitad para cuando termine la cata de veneno.

No era que culpara a los catadores de veneno. Pero ver sus rostros asustados y pálidos mientras comen lentamente de su cuchara cada vez, eso es lo que mata su apetito.

Hoy también, pensó que se están tomando un tiempo terriblemente largo por la misma cosa sin sentido.

Sin embargo, de alguna manera fue un poco diferente.

Por lo general, era un hecho que todos los catadores de veneno se mirarían entre ellos mientras se turnaban para sostener la cuchara.

Hoy, sin embargo, hubo un catador de veneno imprudentemente entusiasta.

El catador de veneno de la Consorte Noble, una doncella bajita sin ni siquiera un kanzashi en sus cabellos, agitó una copa de plata antes de beber de ella.

Después de tragarlo lentamente, se enjuagó la boca como si no fuera nada.

Pensando en el pasado, estaba seguro de que la había visto de algún lado, y le dio un kanzashi no hace tanto tiempo. Ella estaba bien vestida, pero no era muy atractiva. El tipo que no destaca demasiado entre las hermosas damas de la corte del Palacio Interior.

Sin embargo, ella era una niña, que era inexpresiva en algunos aspectos, con ojos penetrantes que cautivaron a los demás.

Para una chica tan hostil, ella era sorprendentemente expresiva.

Y sin embargo, ella estaba probando el veneno como si fuera natural. Ella era tan extraña.

Se preguntó qué clase de cara haría ella a continuación. Fue una pérdida de tiempo perfecta.

La sopa fue presentada, la chica puso su cuchara dentro. Ella lo miró fijamente, lentamente se colocó en la punta de su lengua.

Pensó que los ojos de la niña se ensancharon por un instante, y ella de repente sonrió como si se estuviera derritiendo en la embriaguez.

Mejillas ruborizadas, ojos a punto de llorar. Sus labios dibujaron un arco, y de sus labios ligeramente separados, él vio dientes blancos y una lengua cautivadora.

Por eso las mujeres son aterradoras.

Esos labios que lamieron esa gota, era como una sonrisa de fruta madura de una prostituta de clase alta.

La cocina debía ser indescriptiblemente deliciosa.

Para hacer que una chica normal hiciera un acto tan fascinante, ¿era algo dentro de ella, o era la habilidad de los cocineros de la corte imperial?

Fue en aquel momento, mientras estaba tragando saliva, que aquella niña realizó un acto increíble.

Ella sacó una toalla de mano de su bolsillo, y escupió lo que acababa de comer.

"Está envenenado".

La doncella, que estaba inexpresiva de nuevo, declaró su tarea finalizada y desapareció detrás de la cortina.

El final del banquete se anunció en medio de la conmoción.

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Y hasta aquí el capítulo. Comenten, agradezcan y critiquen al gusto, pero sin tacos, por favor.